ESCRIBIR ES VITAL COMO EL OXIGENO

Tenemos claro que el gobierno, la religión, la mayoría de medios de comunicación y el sector empresarial están destinados a salvaguardar la continuidad del sistema dominante en el poder México. Se ha señalado también que la educación requiere ser transformada de tal forma que nuestra cultura igualmente tenga impacto. Pero en realidad si hay algún elemento que permita, sí, la queja, pero también a la vez el progreso, es la escritura.
Cuando hablamos del lenguaje escrito no se trata únicamente poner cualquier tipo de letras en una hoja de papel, vemos que esa labor de muchos medios impresos en el país si bien parece ser perfecta, que exalta la buena ortografía y se la pasan informe e informe, en realidad no se traduce en algo productivo para los mexicanos. Porque nos dicen lo mismo para lo mismo, para que estemos viendo como nos saquean y nos despojan sin hacer algo para evitarlo. Quisiera hacer un paréntesis exclusivo para los blogs, bitácoras, que han aportado algo muy humano a este momento de crisis en el país.
Dentro de estos espacios en Internet la gente que los diseña y algunos lectores han optado por generar ideas, a partir de ellos, su concepción y experiencia de la vida, para plasmarlo en textos que podrán carecer muchas veces de ortografía pero que sin embargo tienen un gran sentido humano. No hablo de los textos que solo insultan o profieren quejas en buenas rimas al sistema, no, hablo de textos productivos que motivan a la misma gente a adquirir el compromiso para la transformación de su medio. Lo que resalta del lenguaje escrito no es otra cosa sino la crítica, propuestas, análisis y la innovación, todas estas cosas son las que más urgen dentro de nuestra lucha para sacar adelante a México.
Diariamente podemos delimitar bien (quizás en porcentajes) todos los textos que señalan una y otra vez lo malo que ha hecho el sistema para tenernos como estamos, por otro lado podemos leer notas que alaban y resaltan la labor de la cara buena de la moneda, que si AMLO, que si Calderon, etc. pero realmente hay que también interesarnos en hacer, corresponsabilidad con el sistema y escribir con los ojos abiertos y no con una venda en nuestros ojos, ir más allá de hablar y señalar sea para bien, sea para mal. Igualmente no sirve solo saber que en tal lado hubo esto o se hizo aquello, ¿qué beneficio tiene informarme siempre sino voy a moverme de mi asiento para hacer algo que cambie esas situaciones dadas? Ya lo vemos con gente reconocida, periodistas, mismos políticos, por hablar y escribir quizás nunca vayan a parar ¿pero cuando impulsarán algo que se pueda traducir en acciones efectivas y señalarlas al gobierno en el poder -por citar un solo caso, porque hay más-?
Es aquí donde usted y yo encajamos a la perfección porque si nos quedamos esperando a que determinados actores lo hagan, quizás jamás veamos el México que tanto hemos esperado tener. Será a partir de nosotros que se darán los cambios fundamentales y está comprobado que el pueblo que sabe escribir, que se atreve a hacerlo, es capaz de conocerse, saber quien es y trazar bien la senda para lo que pretende llegar a ser. Por ello he insistido una y otra vez en que, tenemos que estar informados y asi, todo lo vertido en cada nota asimilamos aquellas cosas que dentro nuestro circulo inmediato de vida estorban para hacerlas a un lado. Por citar un ejemplo: estamos leyendo a diario notas del ridículo que hace Calderon dentro y fuera del país, escuchamos que ya está amarrada prácticamente la privatización del petróleo, que hay corrupción por aquí y por allá… bueno sí, ¿y luego que?
Bien, yo dentro de mi comunidad debo comenzar a identificar los males por muy mínimos o enormes que estos sean, si tal delegado no trabaja bien, si algún representante local anda haciendo porquerías, esa es mi inmediata responsabilidad, ¿sino lo hago yo, entonces quien lo hará? Y es aquí donde tanto los blogs y otros medios -como volantear- juegan un papel clave, porque habremos de informar a nuestros vecinos, más allá de sus profesiones, de su afinidad política, que existen demasiados, bastantes problemas de corte humano que afectan a nuestras familias. ¿Podemos aterrizar los grandes problemas en sus focos más pequeños para empezar así un verdadero cambio? ¡Claro que sí!
En mi universidad ya sabemos que hay cosas que no operan para beneficiar al estudiante, nos dedicamos algunas semanas a investigar, a consultar distintas fuentes, dentro y fuera de la universidad, ahora si que dominamos las noticias respecto a ese circulo, la universidad. A partir de ello dijimos: aquí hay tales necesidades prioritarias, como cafeterías, bibliotecas, fotocopias y becas. Se han estado conformando comisiones las cuales van a ver por que esos problemas se solucionen y se tenga que hacer lo que se tenga que hacer, se ha de luchar para que lo que es posible hacer (pero que el sistema dominante se opone a que sea realidad) y no solamente nos quedemos en los buenos deseos. ¿No puede usted hacer lo mismo en su barrio, colonia y comunidad?, ¿qué no serían verdaderas redes de ciudadanos las que harían temblar al sistema –a parte de grandes manifestaciones en el Zócalo o donde sea-?
Muchos no se atreven a escribir por temor a la ortografía, pero considero que eso se va arreglando conforme se vaya uno acostumbrando a escribir. Otra de las cosas que no podemos hacer es escribir tal y como hablamos, hay una diferencia muy grande entre el lenguaje oral y el escrito, debemos practicar, ensayar, leer es necesario pero no lo suficiente. Tenemos que aprender a identificar palabras clave, los temas de fondo de cada nota o artículo, debemos tener coherencia en lo que escribamos. Todo esto tiene relación porque será un registro de nuestra lucha que presentes y futuras generaciones podrán consultar para estar inmersos en este suceso histórico, porque a la vez será un espejo que podamos ver una y otra vez y aprender del reflejo que apreciamos. No se a usted pero a mi hacer escritura es tan vital como el oxigeno…Nunca es tarde para empezar ¡hagamoslo!